Dejando una sola huella…

A pesar de que son dos pies, sólo se deja un rastro, a veces sobre la blanca arena se dibujan más pares de huellas, pero jamás serán constantes, no siempre seguirán tu paso, no siempre serán las mismas ni siempre te acompañaran en tu largo trasegar…. La mayoría del tiempo sólo verás un par de huellas dibujadas en la arena… La brisa del mar acaricia tu piel y moldea tu cabello al son del viento, la marea viene y va en un danzar extasiante y per turbante, refresca tus pies pero se lleva consigo rastros que habías dejado en el camino, dejando momentos vacíos, sin marca, sin memoria… momentos que tal vez fueron felices y podrían borrar las huellas que reviven amargos recuerdos, dolores y sentimientos… 

Un diente de león blanco por el tiempo, desprende con el viento los sueños de un sentimiento, un sentimiento que crece ó se destruye con cada palabra de aliento ó desprecio, deriva de todo lo demás, todo es el sentimiento y el sentimiento lo es todo, con él la felicidad en su máxima expresión, sin él el túnel de la perdición, sólo basta con que un pedazo sea falso o esté quebrantado para romper con toda la estabilidad ya lograda después de tanto caminar sobre la arena mojada… 

Día tras día llega la noche, momento para descansar en los sueños que se salen de la realidad, paseando por lugares asombrosos que ni en la tierra ni en el universo tal vez tengan lugar, un mundo fantasioso dónde sólo habita tu ser y quienes al parecer merecen estar en él… tu mente crea la historia y tu SER intangible la vive, es tan hermoso pensar que todo eso puede llegar a ser parte de tu realidad… pero todo se torna lento y agobiante cuando el sueño es suplido por el reflejo contrario de su significado, el sueño perfecto se ve convertido en un macabro festín de sentimientos, en una pesadilla, una realidad ambigua que lastima las heridas ya nacidas en la existencia real.

Qué es lo realmente importante al caminar por la arena?... dejar huellas que valgan la pena y marquen un sendero para quienes pasarán por ahí en algún momento… no pisarán las mismas pisadas que tú diste, pero ayudarán a marcar su horizonte sobre el mar dibujado a lo largo del alrededor de tu posición… siempre hacia el norte, a veces con atajos hacia el oriente u occidente, y una que otra vez devolverse hacia el sur recordando lo que ya pasó… Eso es lo que importa… marcar la arena de buenas experiencias que revivirán con cada huella que sea repisada por otro par de pies, que quieren llegar al mismo lugar que tú pero a su manera… crecer no es crear una imagen falsa ante la humanidad para decir que somos maduros, es tomar responsabilidad del ser que habita dentro del cuerpo y como queremos ser vistos realmente por la sociedad sin satisfacer sus “necesidades” ni dar gusto a sus “deseos”… simplemente ser original, no una copia barata de nada ni de nadie… Haces muchas cosas en la vida, pero siempre serás recordado por una en especial, por esa marca indeleble que dejas en los seres de tu mundo interior con tu personalidad y todo lo que encierra ser tú y sólo tu como ser independiente y capaz… no trates de impresionar a los demás, primero impresiónate tu de ti mismo para que los demás vean la grandeza de tu ser en todo su esplendor… Deja tu propia huella, comparte tu esencia, crea una memoria perpetua de tu vida en la realidad del planeta tierra…