sábado, 14 de julio de 2012

Nuestro Nexo… Mi Nexo


-Tengo la mirada inundada de gotas de rocío del manantial de felicidad… ¿Un Nexo?

-Sí un Nexo… un lugar feliz, apacible, donde no importa lo que sueñes… todo se hará realidad -le sonríe amplio y le extiende la mano- si quieres puedo invitarte al mío, puedo compartirte mi mundo y si quieres hacer parte de él, eres totalmente bienvenida

-La pequeña princesa sorprendida calla mientras en sus ojos irradia felicidad y curiosidad-.

Si supieras, en un templo no muy lejano tengo tu imagen en todo el centro... quizá no lo sepas, pero ya haces parte de él... inspiras gran parte de su creación y motivación…

Invencibles… invencibles nos volvemos cuando encontramos algo por lo cual vale la pena luchar, estúpidos cuando vemos que tan sólo se llama soñar, milagro cuando vemos que en la vida si existen sueños tangibles y decepcionados cuando descubrimos que no son para nosotros…

Escuchar mis pensamientos optimistas es leer el libro de  mis sueños, el que redacté en el viento como plegarías al cielo, mientras la luna dibujaba el sendero… lástima que siempre se quedan en eso… en plegarías, en deseos, en anhelos vacíos que después de todo jamás podrán ser más que la esperanza maldita de un ser que siempre espera encontrar ese ser que ocupe la silla vacía…

Fue lindo mientras el sueño se materializó, hubiera deseado de todo corazón que se eternizara, pero no puedo obligar a alguien a que pertenezca a un mundo en el que no se siente a gusto… si bien, sólo te invité a mi Nexo, mi lugar feliz, el lugar que he tratado de construir durante todos estos años para no perder la compostura y con ella el aliento…

Sé que no es perfecto, al igual que mi alma está algo rotico, descompuesto… aunque han pasado los años en el castillo aún hay grietas que no he podido arreglar y sé que nadie se quiere quedar en él… hace mucho frío, el silencio asusta y la oscuridad amenaza con acabar con el pequeño mundo… pero aún así quiero seguir construyéndolo poco a poco, quizá algún día sea tan radiante y bello que alguien quiera quedarse ahí conmigo para siempre…

Hoy comprendí que sí... conocí un ángel... sólo que no era el destinado para mi... ahora en su ausencia queda un lindo recuerdo que quizá me haga llorar, de seguro sonreír y pensar que en algún lugar del mundo se encuentra el ángel para mi... Gracias por todo...