Si has de amarme de esa manera, prefiero tu odio y repulsión, si al protegerme me encierras, prefiero ser vulnerable y ser presa de cualquiera diferente a ti. Me tienes harta con tus ataques de cariño compulsivo, tu ideal para mí vida y hacer de mí la marioneta perfecta atendiendo a cada cosa que pides sin poder contradecirte.
Al parecer no te das cuenta que con tus actitudes reprimes mi libertad, coartas mi expresión y desesperas mi razón. Es desesperante ver el reloj y saber que pronto llegarás, es inexplicable quererte, amarte, pero desear que estés lejos de mí… a tu lado siento que me asfixio, tus palabras me ahogan y tu cariño llega a fastidiarme.
Atenderte, escucharte es molesto cuando esperas que sea de la manera que te gusta, todo lo pones como imposición, no dejas que los demás decidan si quieren o no hacer lo que propones.
Siempre creando realidades paralelas, que sinceramente, por muchos argumentos que tengan no tienen por qué pasarme justo a mí, tanto como sigas pensando que me pasarán, algún día te encontrarás con la sorpresa de verme víctima de tus propios inventos.
Tropiezo cada vez que a ser semi dios juegas, pareces el gerente de una gran compañía con la diferencia que yo soy tu hija, no tu empleada. Me cansé de estar siguiendo tus órdenes, tus deseos, creer en lo que crees, pensar en lo que te gusta, hacer que te sientas bien a costa de mi censura… y entonces ¿dónde queda lo que yo quiero, sueño, anhelo, creo, deseo…?
Sabes, tengo ideales, pensamientos, creencias… tengo una vida que quisiera, si me lo permites, manejar a mi manera. Ya tengo las bases necesarias para saber que está bien y que no, ya no soy aquella cría que te pedía ayuda a todo momento, con el paso del tiempo aprendí a defenderme por mi cuenta, y aunque te duela es una ley de la existencia. Ha llegado el momento en el que debes dejar de ser el papá mandón, para ser el que mira su proyecto. Cabe la posibilidad que tenga errores que te peguen donde más te duele, pero son mis decisiones y en algún momento tendrás que afrontarlas, aceptarlas y por qué no, superarlas.De nada vale que me digas que me amas cuando tu cariño me aferra a la idea de partir, me saturas, entiendo que te preocupes y que desees lo mejor para mí… pero a éste paso lo mejor será estar lejos de ti.
Tu amor raya en lo egoísta, la necesidad de sentirme cerca, va más allá de lo que yo quiero, te atreves a desear que permanezca siempre a tu lado sin preguntarme si es lo que deseo.
Y sabes, cuando el amor es latente, no importa la distancia material, los corazones siempre sentirán el candor del otro haciendo que la distancia sea solo una ilusión mental.
Sí en verdad me amas déjame volar, ya verás que aun cuando no me veas siempre estaré a tu lado.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Solo escribe lo que piensas, no importa qué diga el mundo sobre ello...