Firmamento…

Envidio al cielo terrestre, puede guardar a todo el mundo bajo su amparo día y noche, nada ni nadie puede salirse de su campo visual… todos estamos dentro de él… lo ve todo, nos acompaña y se vuelve guía, cuando estamos desesperados buscamos verlo para clamarle la solución a todo lo que atañe nuestro corazón… Millones de ojos se elevan cada segundo maravillados de su existencia, en las mañanas su azul profundo nos reconforta y nos llena de nuevas esperanzas, con el algodón de las nubes podemos construir ilusiones, con el negro de la noche recreamos emociones qué sólo en sueños no tienen reproches, en las estrellas titilantes moran todas las lágrimas secas que se han refugiado cada noche pidiendo auxilio, la luna llena nos aligera, en su forma creciente nos espera, en su menguante reposamos y en luna nueva descansamos en la oscuridad intensa… 

Quisiera… romperme en pedazos… No es masoquismo… al menos de esa manera, podría estar en parte con todos a los que quiero … que el pedazo que cada uno tenga se convierta en lo que más desee, necesite y anhele… palabras, abrazos, cachetadas… simplemente una compañía en su soledad. Suena absurdo decirlo, pero la soledad no es exactamente el hecho de estar solo… a veces te siente solo aún cuando sabes que muchas personas están contigo de una u otra manera… es un momento en el que te encuentras con tu ser…y… cuando sales de su sopor quieres ver a tu lado un rostro conocido, un ser real, diferente al que creas cuando te aferras a tus piernas en busca de aquel ser… buscas una compañía en tu soledad…

“El amor es una fuente imparable de cariño”, no importa cuanto cariño quieras dar, siempre sale más y más conforme lo vas “necesitando”… lo cual significa que no porque quiera a alguien más vaya a quitarte afecto a ti… no a todos los quiero de la misma manera, no todos representan lo mismo en mi vida… cada quién con su existencia le da un toque diferente a la mía para hacerla más diversa e interesante, para crear nuevos “fenómenos” – experiencias – de los que salgan buenos momentos para escribir memorias en la bitácora de la vida diaria… 

Mi existencia es una máquina llena de muchas piezas, todas son importantes, pero no todas tienen la misma relevancia en mi vida… hay unas que jamás podría remplazar, hacen parte del mecanismo base, el que me hace levantarme cada mañana optimista por el día que acaba de comenzar, con energías para dar lo que mi interior tiene para mostrar, expectante de lograr alegrar tu mañana y bendecir al final del día tus sueños… Quiero ser parte de tu cielo y que te des cuenta que aunque vea muchas personas, siempre estarás dentro de las prioridades en mi cabeza…

“Si algún día despiertas y estás en un cuarto rojo sin puertas ni ventanas… no te asustes, estás en mi corazón”… y así será eternamente, siempre y cuando quieras habitar en él, haces parte de mi y de todo mi ser… siempre estaré pendiente y tendré tiempo suficiente para escucharte, leerte y abrazarte fuertemente…